La habitación tenía vistas espectaculares y estaba muy cómoda. Sin embargo, el ruido de obras al lado fue molesto.

El desayuno fue un festín! Disfruté de una variedad increíble de productos frescos, desde embutidos hasta deliciosa bollería artesanal. Además, me encantó que el hotel te da una audio guía del pueblo, perfecta para explorar. La atención de Leticia fue un abrazo cálido en cada interacción, ¡parecía que conocía al pueblo de memoria!

La habitación que me tocó estaba en la planta baja, lo que me dejó con ganas de vistas más impresionantes. Con lo que pagamos, esperaba estar en una del primer o segundo piso. Aunque aprecio el encanto del lugar, siento que merecíamos mejor ubicación.

la experiencia fue increíble, la ubicación es brutal, justo a la entrada de la villa y el ascensor llega hasta las habitaciones. el jardín es precioso, desayunamos afuera con vistas espectaculares. la habitación tenía un microclima perfecto en plena ola de calor, y el desayuno fue un buffet muy variado, todo súper rico. el trato del personal también fue muy amable, súper atentos en todo momento.

la almohada podría ser más cómoda y el parking es un poco limitado.

- Desayuno variado
- Personal amable
- Vistas espectaculares

- Ruidos de eventos

Vistas desde balcones, jardín y terraza para relajación, encanto local histórico

El acceso al aparcamiento es complicado, ¡hay que caminar un buen tramo desde donde uno deja el coche!!! Además, el ruido de las habitaciones contiguas puede afectar el descanso, especialmente si estás en la planta baja.

maravilloso pero con un par de detalles pendientes

La ubicación es magnífica, perfecta para explorar la naturaleza y disfrutar de un ambiente rural. Las habitaciones son amplias y muy bien decoradas, con todas las comodidades necesarias para una estancia agradable. Además, el desayuno es increíble, con una variedad que satisface todos los gustos.

La cama podría ser un poco más cómoda, ya que me pareció un poco dura.

el bufete de desayuno es variado y delicioso. el pueblo es muy pequeño y pocos restaurantes abren.

Disfrutamos de una estancia genial con amigos. La ubicación es ideal para pasear y topar con los maravillosos conciertos de las velas, donde más de 25,000 velas iluminan las calles. El desayuno es variado y muy conveniente para empezar el día.

Algunas habitaciones pueden tener un poco de ruido si hay eventos cercanos, algo a considerar si buscas tranquilidad.

Disfruté de una habitación amplia y tranquila, ideal para descansar después de un día de explorar. Me relaje en la terraza con vistas increíbles y también aproveché el bonito jardín para tomar algo al aire libre. Solo me hubiera gustado que las almohadas fueran un poco más cómodas, pero en general, ¡una experiencia chula! 😊

Este lugar me queda perfecto y me ofrece todo lo que necesito, wifi, aire acondicionado y televisión de pantalla plana. Recuerdo que en mi primera estancia, el personal me ayudó a encontrar mi collar perdido. Siempre son muy amables. ¡Volveré en unos días!

La habitación era amplia y cómoda, aunque el aparcamiento es complicado.

La habitación era grande y muy cómoda, con calefacción por suelo radiante que se siente genial. Las vistas son espectaculares, especialmente al atardecer. La decoración es cuidada y hace que te sientas acogido. Lo único malo es que la cama era un poco dura para mi gusto, pero el servicio fue increíble y ¡el desayuno estaba riquísimo!

Descanso y encanto en la habitación con vistas

Elegimos una habitación orientada a las montañas y fue un acierto total. la primera noche fue ideal en términos de tranquilidad. Las vistas desde el jardín donde se sirve el desayuno son simplemente espectaculares y el ambiente es muy relajante. Sin embargo, la segunda noche tuvimos problemas de ruido debido a un evento cercano que nos impidió descansar adecuadamente. El servicio del personal fue excepcional en todo momento.

Las instalaciones son muy nuevas y con un gusto exquisito. Tiene una terraza maravillosa con vistas a las cigüeñas y un ambiente relajante que se nota. Perfecto para desconectar.

Eso sí, no esperes siesta con tanto ruido ajeno, ¡más vale llevar tapones!